Me encuentro otra vez en nuestro barco, pero estoy altamente enfadada, de no poder conseguir ninguna prueba para culpar a la odiosa Etelka Herzen ni tan siquiera una simple pista sobre la Corona Roja. Eso sí: con una gran satisfacción al verla morir de la manera mas ridícula posible, intentando lanzar un hechizo que seguramente era demasiado para una mente tan simple como la humana.
Seguimos sin tener ni idea de nada de quienes forman ninguno de los dos cultos que parece que solo tienen la maldita manía de seguirnos y hacer que cada vez me saquen más de quicio.
Nos dirigimos nuevamente la primera construcción para el nuevo sistema de alarma entre ciudades humanas, primitivos y arcaicos sistemas. Cuándo aprenderán….
Por suerte podré ver a alguien que tolero un poquito dentro de este mundo que cada vez veo más claro que necesita ser purgado de todo mal. Espero que Aynjulls se encuentre aun en la zona con sus enanos (extrañamente eficientes y buena gente).
Hacemos un pequeño parón, simplemente para descubrir lo mismo de siempre: gente que engaña, miente, extorsiona, y nuevamente la Mano Púrpura… otro culto que aún nos persigue y no sabemos nada de ellos.
Seguimos el camino sin interrupciones ya por fin hacia la torre de señales, descubro con un gran enfado que un grupo de malnacidos ha capturado la torre y es posible que tengan retenida a Aunjulls o peor aún que la mataran, lo que hace que mi poca paciencia se acabe y me sienta con la gran necesidad de lanzarme a por ellos.
Gracias a mis grandiosas habilidades mágicas, y mi maravilloso eh imponente hechizo EXPLOSIÓN, consigo yo sola «como siempre…» acabar con todos y cada uno de los enemigos que estaban en la torre, al verlos arder, empiezo a notar que hay una voz en mi interior que me empuja cada vez más hacia una meta que parece cada vez más dulce y deliciosa verdad.
Miro a los dos nuevos integrantes de mi grupo y me pregunto: si no fuera porque el barco no se puede llevar solo…. no sé para qué los llevo si al final siempre lo hago yo todo… me siento muy sola en este mundo humano, y esa voz que me habla cada vez más fuerte parece que me comprende mejor que nadie.
Consigo rescatar a Aynjulls, por suerte una enana que vale la pena soportar. Está viva y nos acompañará en una parte de nuestro viaje, estaría bien que se quedara con nosotros, ya que me encanta charlar con ella.
Bajamos al laboratorio secreto de Barón Wittgenstein, abrimos la sala secreta con la última llave, para descubrir que la piedra bruja no está allí….
Por suerte descubro 2 grimorios, y una nota que da a entender que la última ubicación conocida de la piedra es el castillo de la misma familia.
Y aquí me encuentro en el barco de camino a otro sitio que seguramente necesite ser purgado, con mi amiga Aynjulls, y una voz que cada vez me deja más claro qué tengo que hacer y por dónde tengo que ir…..
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